Los derechos de autor de un libro electrónico

09/04/2024

Los derechos de autor de un libro electrónico

En los últimos años, muchos sectores se han modernizado para adaptarse a las nuevas necesidades digitales... El sector editorial no es ajeno a estos cambios y también se ha reinventado, ejemplo de ello es el libro electrónico, con el que ya convivimos desde hace un tiempo. ¿Están protegidas las publicaciones en este formato? Lo veremos en este artículo.


Tras un gran crecimiento en 2017, el número de lectores en soporte digital se ha mantenido estable desde hace años: casi un 30 % del total lee en este formato. Para hacerlo, utilizan distintos dispositivos, como el libro electrónico (e-reader) u ordenadores y tabletas. Así se desprende de los últimos datos publicados por la Federación de Gremios de Editores de España (FGEE), con el patrocinio de CEDRO y el apoyo del Ministerio de Cultura, en el informe Hábitos de Lectura y Compra de Libros en España 2023.

¿Están protegidas las obras en este formato? 

Con carácter general, no existe ninguna diferencia entre la protección que reciben los libros electrónicos y aquellos que se publican en papel, ya que el requisito para que una obra esté amparada por la Ley de Propiedad Intelectual (LPI) vigente es que sea original y haya sido creada por un ser humano.

Por tanto, cualquier acto de reutilización (reproducción, comunicación pública, distribución, fotocopia, etc.) que se quiera llevar a cabo sobre una obra, debe hacerse con la autorización previa de su titular de derechos, salvo en aquellas excepciones o límites que recoge la propia LPI.

Además, en el caso de los libros electrónicos, hay ciertas cuestiones a las que debemos prestar especial atención. Cuando compramos un libro electrónico no estamos adquiriendo el libro como tal, sino que obtenemos una licencia de uso y, en consecuencia, solo podrá utilizarse en aquellos casos que esta licencia autorice. Esto quiere decir que, por lo general, no podemos compartir un libro electrónico con nuestros amigos y familiares, algo que sí podríamos hacer con cualquier libro físico.

Son especialmente preocupantes algunos datos en este sentido, pues del total de lectores en formato digital, solo un 38,3 % de ellos compró libros de pago. Esto quiere decir que la amplia mayoría los obtuvo de forma gratuita, por ejemplo, descargándolos de internet o a través de familiares o amigos que compartieron los archivos con ellos... 

Retos del libro electrónico 

Como hemos visto, la llegada del libro electrónico ha supuesto la aparición de nuevos retos a la hora de proteger la propiedad intelectual de autores y editores, dado que la digitalización del sector editorial ha traído consigo un aumento del robo digital de contenidos editoriales, así lo confirma el Observatorio de la Sostenibilidad de la Cultura Escrita, que pone de manifiesto que, solo en 2022, se produjo un aumento de accesos a páginas web que comparten contenido ilícito de casi el 60 %. De hecho, estos accesos no han dejado de crecer desde el año 2017.

La vulneración de los derechos de propiedad intelectual se ha trasladado al entorno digital. Así, con tal de proteger las obras, resulta clave educar a la sociedad en la importancia de respetar los derechos de autor de las obras originales, un aspecto que es fundamental para asegurar la sostenibilidad de la cultura escrita y la integridad de los titulares de derechos de las obras. 

Algunos consejos para acceder legalmente a las obras 

Quienes sean lectores de libros (u otras publicaciones) en formato digital, deben tener en cuenta varios aspectos a la hora de acceder a estas publicaciones, con tal de hacerlo de forma segura y respetando los derechos de autor. 

Por ejemplo, es importante adquirir estos libros en páginas web de confianza (en las propias tiendas de las editoriales o del autor de una determinada publicación) o a través de plataformas de distribución de prestigio. Además, es importante aplicar en todo momento el sentido común. Por ejemplo, no es habitual encontrar una obra que se ha publicado recientemente de forma gratuita. 

También ocurre que muchas veces se comparten contenidos por grupos de mensajería, que se han convertido en uno de los principales canales de acceso ilegal a obras editoriales. Por tanto, debemos evitar descargar y distribuir este tipo de publicaciones mediante estos chats. 

Javier Díaz de OIarte, director jurídico de CEDRO, abordó en el programa de radio Creando que es gerundio los derechos de autor del libro electrónico hace unos meses. Puedes escuchar el programa completo aquí.

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