29/07/2014
Los escritores británicos, con dificultades para sobrevivir
Hace unas semanas, la asociación de autores británica ALCS presentó, junto con la Universidad de Londres, un estudio que explica la situación actual de los autores en el país y que los ingresos medios de estos son insuficientes para vivir. Para la asociación, tanto la bajada de ingresos como la caída estrepitosa del número de escritores a tiempo completo es «dramática».
En concreto, desde 2005 hasta 2013, el número de escritores que se dedican a escribir a tiempo completo, y, por lo tanto, cuyos ingresos proceden solo de la escritura, ha disminuido desde un 40 por ciento a un 11,5 por ciento. Esto es: solo el 11,5 por ciento de los escritores puede vivir de su trabajo. Casi 30 puntos porcentuales de caída que, para ALCS, puede tener «serias repercusiones» para la calidad de las obras y el éxito económico de las industrias culturales británicas.
En cuanto a los ingresos medios de los escritores a tiempo completo, el estudio asegura que la bajada ha sido de un 29 por ciento. En 2005, los ingresos brutos medios de estos autores eran de 15.450 libras, mientras que en 2013 cayeron hasta las 11.000 libras. Una situación que se agrava más, tal y como recuerda el estudio, si tenemos en cuenta que el límite medio de ingresos para llevar una vida aceptable en Reino Unido está en torno a las 16.850 libras, una cifra muy superior a la media de lo que ganan los escritores.
Por su parte, la situación es aún peor para ese 88,5 por ciento de escritores que no pueden vivir de la escritura: sus ingresos brutos medios son de solo 4.000 libras anuales, habiendo disminuido estos un 19 por ciento desde el año 2005 y quedando muy lejos de las 16.850 libras que se consideran aceptables para llevar una vida digna.
La edición digital aún está despegando
La mayoría de los ingresos de los escritores continúa viniendo de la edición de sus libros en papel y, en segundo lugar, de sus colaboraciones con revistas. Es tras estos donde encontramos los ingresos por la edición digital, que se convirtieron en 2013 en la tercera fuente de ingresos para los autores.
Contribución a la economía
Desde la ALCS se recuerda que, según el Ministerio de Cultura, Medios y Deporte británico, las industrias creativas mueven un total de 71.400 millones de libras anuales y sitúa al de Reino Unido como el sector creativo más grande de la Unión Europea. Una situación que, alertan, puede cambiar debido al «rápido declive» de la situación de los escritores.
Así pues, desde la asociación se ha pedido en el informe que, para que los autores continúen haciendo su «irreemplazable contribución a la economía», es necesario que reciban una «justa remuneración» por su trabajo. Lo cual requiere una legislación en torno a la propiedad intelectual que defienda la capacidad de los autores de «ganarse la vida con sus creaciones».
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